miércoles, 5 de agosto de 2009

Voces

Y en el año 2030 se terminó de tender la malla de seguridad A, una demostración de lo que podía generar el compromiso mundial a la solución consensuada del capítulo mas critico de la historia de la especie.

El punto final a las elucubraciones sobre la vida de tal o cual.

 Ya hace un año de esto…

 

Ya no puedo ocultar ni mis pensamientos. ¿Se puede estar más a la vista? Mi existencia se reduce a lo que ven y oyen.

 Soy civilizada, solo quiero que me dejen en paz…

 

La malla lo atraviesa todo. Entra donde quiere y permanece. Ese es el punto. No discrimina estéticamente. No se interesa particularmente.

 No deja pestillo, grieta ni ventana sin abrir.

Al que trate de engañarla le caerá encima la consecuencia.

 Así: La consecuencia.

 

No tiemblo por esta vida que me libera de la sospecha.

Tiemblo por la consecuencia.

 

El vendedor en la penumbra se frotó las manos.

 El coleccionista no pudo disimular su interés (¿Qué fue de ella?)

¡Una chuchería de más de dos siglos! Sin embargo le haré una oferta que no podrá rechazar.

No hay comentarios: